La Fortaleza de Vernio ofrece a los visitantes una atmósfera fascinante y una oportunidad única de sumergirse en la historia medieval. Se alza majestuosamente sobre una colina en la aldea de San Quirico, municipio de Vernio, en el alto valle del Bisenzio, dominando el paisaje circundante.

Esta fortificación, corazón de importantes feudos, se remonta a la época de los condes Cadolingi, alrededor del siglo XI, y posteriormente pasó a la familia Alberti después de 1113. En 1332, fue adquirida por los condes Bardi, que se convirtieron en señores feudales de Vernio.

Lamentablemente, de las estructuras fortificadas originales sólo quedan vestigios, aunque el palacio condal y el grupo de casas circundantes, que se encuentran dentro del castillo, todavía se consideran fortaleza.

En el pasado, el castillo era una fortaleza defensiva amplia y bien estructurada, pero la mayor parte de sus estructuras militares fueron destruidas durante los conflictos que afectaron al territorio de Vernio entre los siglos XIV y XV. Sin embargo, las ruinas aún visibles permiten percibir el tamaño del complejo original.

El pueblo medieval, por el contrario, se mantiene intacto y bien conservado. Incluye la residencia de los señores feudales y una capilla dedicada a Sant'Agata, construida en 1556 y posteriormente restaurada en 1706.

Hoy en día la fortaleza es de propiedad privada, pero es posible visitarla previo acuerdo con los propietarios. Se puede llegar fácilmente desde una carretera asfaltada que parte del pueblo de Sasseta, pero recomendamos tomar la carretera más panorámica: la carretera medieval que va de San Quirico a Poggio di Mezzana o recorrer toda la Ruta de las Fortalezas.